La innovación israelí siempre ha prosperado en la adversidad. Como país que ha enfrentado numerosas crisis –desde guerras hasta recesiones económicas y pandemias globales–, Israel ha salido constantemente fortalecido y su ecosistema de startups es más dinámico que nunca.
El año pasado, marcado por los devastadores acontecimientos del 7 de octubre y las guerras posteriores en Gaza y el Líbano, puede parecer un momento improbable para apostar por la Start-Up Nation. Pero la historia nos muestra que los momentos más oscuros de Israel a menudo dan lugar a sus innovaciones más innovadoras.
Ahora no es diferente.
El patrón de crecimiento en medio de la crisis
Consideremos las secuelas de la Segunda Guerra del Líbano en 2006. En ese momento, la economía de Israel enfrentaba desafíos importantes, pero vio un aumento en los avances tecnológicos.
Un análisis de Start-Up Nation Central revela que el sector tecnológico de Israel no sólo resistió los impactos inmediatos del conflicto sino que también experimentó un crecimiento sustancial en los años siguientes. Empresas como Waze, la aplicación de navegación adquirida por Google por más de mil millones de dólares, se fundaron en los años posteriores a este conflicto.
De manera similar, durante el conflicto de Gaza de 2014, por ejemplo, la demanda de soluciones avanzadas de ciberseguridad provocó un aumento de la innovación, y las empresas israelíes se hicieron con casi el 20% del mercado mundial de ciberseguridad en 2018. Estos logros no son accidentales; surgen de una mentalidad que considera cada crisis como un campo de pruebas para el ingenio.
La recesión global de 2008, que causó estragos en las economías de todo el mundo, fue un período fértil para las nuevas empresas israelíes. Muchos de los unicornios actuales (compañías como Fiverr, conocida por revolucionar el trabajo independiente, y Taboola, líder en recomendación de contenido en línea) se fundaron durante o inmediatamente después de esta crisis financiera.
Estos ejemplos ilustran una tendencia constante: los períodos de inestabilidad suelen ir seguidos de oleadas de ingenio empresarial en Israel.
La pandemia de COVID-19 subraya aún más este fenómeno. A pesar de la recesión económica mundial causada por el COVID-19, Ynet News informa que las nuevas empresas israelíes recaudaron una cifra récord de 9,3 mil millones de dólares. en 2020. Este impulso continuó en 2021, y solo en el primer trimestre se registraron 5,5 mil millones de dólares. en inversiones: más del doble que en el mismo período del año anterior.
Empresas como Diagnostic Robotics y K Health se expandieron rápidamente, mientras que sectores verticales como la inteligencia artificial y la telemedicina recibieron una financiación récord. En 2021, el sector tecnológico de Israel había batido todos los récords anteriores, recaudando más de 25 mil millones de dólares. en capital de riesgo, un testimonio de la capacidad del ecosistema para girar e innovar bajo presión.
Una cultura única de agilidad
¿Qué hace que el ecosistema de startups de Israel sea tan singularmente capaz de convertir las crisis en oportunidades?
Parte de la respuesta radica en su cultura de agilidad. En una nación donde la incertidumbre es una constante, los empresarios están programados para adaptarse.
El ejército israelí, con su énfasis en la resolución de problemas y la rápida toma de decisiones, desempeña un papel fundamental en el fomento de esta mentalidad. Los fundadores aprenden a afrontar los desafíos de frente y, a menudo, aplican su experiencia en unidades militares de élite al mundo empresarial.
Esta cultura no se trata sólo de reaccionar al cambio; se trata de anticiparlo. Los fundadores israelíes son conocidos por su capacidad para identificar necesidades emergentes y abordarlas con soluciones disruptivas.
La oportunidad de inversión
Para los inversores, este historial de crecimiento en medio de la adversidad ofrece una oportunidad convincente. Al seguir respaldando a las empresas emergentes israelíes, los inversores se posicionan a la vanguardia de la próxima ola de innovación global.
El ecosistema tecnológico de Israel está preparado para abordar algunos de los problemas más apremiantes del mundo, desde el cambio climático hasta la inteligencia artificial y la salud global. Sólo en los últimos meses, hemos visto a nuevas empresas israelíes avanzar a pasos agigantados en áreas como la captura de carbono, el transporte autónomo y la medicina personalizada.
Estos desarrollos subrayan la fortaleza duradera del ecosistema y su capacidad para generar retornos enormes, tanto financiera como socialmente.
Un llamado a la acción
Mientras Israel enfrenta uno de los períodos más desafiantes de su historia, la necesidad de una inversión continua en su ecosistema de innovación nunca ha sido mayor. La historia nos enseña que este es precisamente el momento de redoblar esfuerzos, de creer en el poder transformador del ingenio israelí.
Al apoyar a los empresarios que están construyendo la próxima generación de empresas que cambiarán el mundo, los inversores pueden obtener importantes recompensas y desempeñar un papel vital en la configuración de un futuro más brillante para Israel y el mundo.
La mayor fortaleza de Start-Up Nation siempre ha sido su capacidad para prosperar bajo presión. Este año no será diferente. Asegurémonos de que las innovaciones nacidas de los desafíos actuales se conviertan en la base de los avances del mañana.
El escritor es socio director de lool ventures.